martes, 20 de diciembre de 2011

-Quería ser feliz. Todo el mundo busca la felicidad.
-¿Conseguiste alguna vez alcanzarla?
-Creo que sí, pero se trataba de una felicidad partida. Y duraba poco. Además,en cuanto la conseguía, inmediatamente precisaba aumentarla. No me bastaba. Era siempre una felicidad algo anémica, jadeante y poco sólida. Cuesta mucho ser feliz en la tierra.

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Lágrimas que silencian lo que tus ojos quieren gritar.